21.10.07

No TODO es ARTE

A ver, que alguien me explique cómo es que el señor este que mata de hambre un perrito es un artista. No puedo comprenderlo.

Los límites del arte son difusos. Siempre que se quiso poner un límite los dedos acusadores bajan de todos lados y así nacen estas vanguardias artísticas. Pero no todo es lo mismo. No todo es arte. Puede tenerse una cierta tolerancia a los que escriben esas cosas posmodernas, sean poemas, obras de teatro o cuentos en que no se entiende nada y abundan las malas palabras. Puede llegar a entenderse que alguien cuelgue un pedazo de papel en la pared, pinte afuera de los bordes y lo exponga. Pero, discúlpenme, tiene que haber un pequeño criterio.

Ahora es el perro. Mañana podemos atar un linyera y que sea arte también.

5 comentarios:

Diego dijo...

Seguro que eso no es arte. Y sí es arte no todo arte hay que permitirlo. No el que mate con crueldad a seres vivos, por lo menos.

La idea no se puede imponer al sufrimiento concreto. Hay mucha soberbia detrás de ese sometimiento.


Saludos

mariano dijo...

bueno, dieguito, esa es tu opinión, simplemente. realmente no veo por qué los criterios estéticos deberían estar subordinados a la sensibilidad de las almas bellas... "la idea no se puede imponer al sufrimiento concreto", ejem, las ideas se imponen a todo, ese es el índice de su verdad.
por otra parte, contestando la pregunta ¿cómo se puede considerar arte a "eso"? una respuesta estructuralista: porque está en un museo. por la misma razón que el mingitorio de duchamp es arte mientras que el mingitorio del baño del museo donde este se exhiba no lo es.

Diego dijo...

Mariano: Un museo se hace con algunos millones de dólares. Hacer arte con el sólo hecho de instalar algo ahí adentro no puede ser tan barato. Y sí, ese perrito muerto de hambre en el museo tal vez nos haga ver que Duchamp, ya que vos lo citaste, no era tan interesante. Digo, a lo mejor.

Lo de que las ideas se imponen a todo suena demasiado hegeliano para mi gusto.

Saludos

mariano dijo...

En los sesenta, esos años re-locos cuando la gente horrible de ahora era copada (perdón, por la ironía), hubo instalaciones interesantes: Oscar Bony, por ejemplo, presentó en el Di Tella en el 68 una "Familia obrera", mamá, papá e hijitos obreros almorzaban en vivo. En exhibición.
Quiero decir, me parece que el concepto de arte como un pedazo de tela colgada en una pared para ser contemplada es un tanto estrecho. por lo menos desde hace unos cien años. En todo caso me parece que si algo tiene de relevante la discusión estética es precisamente ese cuestionar los límites de la experiecia artística constantemente, y saber que lo que hoy repugna o agrede o indigna no radica en las características inherentes de la obra, sino en el sistema de percepciones del espectador.
saludos.

Diego dijo...

Mariano:

Por supuesto que no se me ocurre descartar todo el arte del siglo XX. Lo que estoy marcando simplemente es que un motorcito que venía guiando a buena parte del arte que se genera y que ocupa espacios se ha encontrado con una piedra grande en su camino, la muerte. Esa lógica que vos explicás y que es la que sostiene dentro de los museos cosas que "no gustan", está con problemas. Para empezar, ese desdoblamiento que propone intentando salirse de la propia sensibilidad del sujeto real, presente, para atender a una verdad superior: "No te gusta porque estás ideologizado, entonces, asumite pecador y callate la boca aunque no te guste". Eso es lo que ha venido generando, no en todo el arte conceptual, pero sí en buena parte del mismo. Con ese perrito muerto de hambre, esa lógica que auspicia la tolerancia por encima del gusto a todo lo que lleve el aval del campo artístico se ha encontrado tolerando el sufrimiento real, concreto, ahí. Y eso mismo es lo que termina descartando todo el malentendido.
Como la Convertibilidad de Cavallo o la Democracia de Alfonsín.

Saludos