Cotidianas XIV

Conversación telefónica.

Ling: Voy y te cocino una tarta... ¿de atún, querés?

Él: Bueno, dale. Hay dos huevos duros, usálos.

Ling: Ay, pero, ¿dónde están?

Él: ¡¿Y dónde van a estar?! En la huevera...

Ling: ¡No, no, no los dejes ahí! ¿Cómo hago para reconocerlos? Yo no sé...

Él (suspiro): Bueno, no te preocupes, los vas a reconocer fácil...


Mediodía. Huevera.

Cotidianas XII

Ling (poniéndose el pantalón): Es la segunda vez que me compro un jean y me doy cuenta a la semana que me queda grande. Me lo tendría que comprar más ajustado, pero no me gusta...

Él: ¿Para qué te lo vas a comprar ajustado, entonces?

Ling: Para que me marque la cola.

Él: ¿Para qué querés que te marque la cola?

Ling: Para que me miren los chicos.

Él (cansado): ¿Para qué querés que te miren los chicos??

Ling: Y, para...

Él: Sí, para ser famosa...

Cotidianas XI

Escuchando mp3s, Ling no resistió la tentación de cambiar la configuración del Winamp que él tan cuidadosamente había seleccionado.

Él: ¿Por qué el contador así? (Cambia para que marque "Tiempo Restante")

Ling: Porque me gusta más. (Toma el control del mouse y vuelve a cambiar)

Él: Pero si en definitiva lo que importa es lo que resta de canción. Lo que pasó ya pasó, ¿para qué querés saber cuánto?

Ling: Pero si ponés cuenta regresiva parece que estás deseando que termine la canción. De la otra manera podés decir: "hasta ahora disfruté 2 minutos 13 segundos".

Él: Ajá. Bueno. Son puntos de vista. Como el rollo de papel higiénico: cayendo desde arriba o desde abajo. Conlleva una visión del mundo, una perspectiva de vida.

Ling: (Sonríe)

Él: Me parece que esto es una cotidiana, ¿no?

Ling: Sí. Mañana mismo.

El horror, el horror

Hace unos días, en uno de nuestros paseos por Caballito, vimos un cartelito en una veterinaria. Un tipo había prendido fuego un perrito porque se había metido en el patio de su casa para visitar a su perrita en celo. El perrito murió, el tipo seguía libre. Los vecinos, indignados, clamaban por la ley contra el maltrato animal. Lo acusaban de "asesino potencial".

Él, siempre tan certero, comentó que un tipo que prende fuego a un perro no encontraría diferencia en, el día de mañana, prender fuego a un nene-de-la-calle que ingresara para, no sé, sacar una naranja o buscar una pelota.

Hoy vemos que tan errado no estaba. Que aún quedan personas que pretenden "limpiar" la ciudad, actuar como - se imaginan - la mayor parte de la sociedad no se anima. Porque el discurso racista, intolerante, está siempre, y en algunos pega más. Se filtra, aparece como la mejor opción, nubla las posibilidades, empuja a la acción. Y, podría apostar, muchos de los policías que lo metieron presos, e incluso muchos de los vecinos de ese señor mecánico y, quizá, para muchos periodistas y demás que andan dando vueltas, muy pero muy en el fondo, deben pensar que, bueno, tan mal no está...

Cotidianas VIII

Caminando por Guardia Vieja, casi Bulnes, pasada la medianoche.

Ling: ¡Ay, mirá, una cabeza! ¿La llevamos?
Él: Noo, Negra, está toda sucia.
Ling: Pero parece Evita... pará, agarrala...
Él (pateando el objeto): ¿Evita? Es más parecida a Golda Meir...
Ling: Pero...
Él: ¡No, basta! No tenés lugar para llevarlo, además.
Ling: Pucha, sos un aburrido.

Cotidianas VI

Hablando por teléfono, él sube el volumen de la radio. Guinzburg y Pais dan las noticias: él lee, ella remata.

Ling: Cada día me banco menos a Ernestina
Él: No sé... Es tan linda que yo le perdono todo.
Ling: ¡¡¿¿Cómo podés ser tan hommmbre??!!

Cotidianas V

Tirado en el diván, mira el noticiero. El locutor anuncia: "Macri continúa la campaña en La Boca". Ling levanta la vista de sus apuntes.

Ling: No entiendo, La Boca era el baluarte socialista por excelencia.
Él: Ajá.
Ling: Tuvieron el primer diputado socialista de América... y ahora... Macri... ¿qué les pasó?
Él: El peronismo. Eso les pasó.
Ling: Ah.

Cotidianas IV

Leyendo el diario, 20 hs, en un colectivo.

Ling: Cuando sea grande quiero ser Martínez Estrada...
Él: Ponete los anteojos que hay poca luz.
Ling: No, mirá, ¿no ves que Martínez Estrada usaba lentes gruesos?
Él: Bueno, seguí así y te vas a parecer a Borges.